Amanece con muy mala pinta, a las 7:15 cae un chaparrón de los gordos, encima la noche ha sido bastante mala, es lo que tiene tener crías pequeñas... bueno, al final toca vestirse de romano y a la gasolinera, punto de encuentro. Aparece Unaitxo y esperamos un poco a ver si aparece alguien. Estamos solos, le doy dos opciones, o tiramos hacia Artikutza, o hacia Azkua. Unai tiene ganas de Azkua. Arrancamos.
Primero hasta el puente, trenbidea, cruzar el puente colgante, vuelta a Irurebieta y empieza la fiesta. Joder, con la charleta ni nos hemos dado cuenta de que empiezan las cuestas!! Primera txanpa y a quitarse ropa... seguimos tranquilos hasta que sin darnos cuenta apretamos un poco y con el culo "ultraapretado" nos pegamos un buen calentón hasta la borda (bueeno, vale, confirmo que Unai me ha tenido que esperar...).
Seguimos hasta la valla de Bertiz y como unos auténticos delincuentes nos metemos en terreno prohibido (tiene coj***s que no se pueda andar en bici aquí...). Subimos hasta casi Aizkolegi y cogemos el desvío de la derecha, el del tronco, hasta llegar a la otra zerrakura y, tras fotitos de rigor, empezamos el cresteo hasta Azkua, desvío a la izquierda por el helechal y ahora todo para abajo hasta Etxalar, 650m de desnivel negativo en un plis, que poco tardamos en bajar y cuánto en subir, eh Unaitxo??
De Etxalar a Lesaka, manguerazo a las bicis y al Antoiu a por la cervecita, que era a lo que habíamos venido.
Al final el tiempo impresionante, ha aguantado como un campeón y encima con solete.
Beti bezala, nekatuak baino konten!!