Arrancamos hacia el puente y vamos por Uskaitz hacia Lizaieta, sin prisa pero sin pausa. Una vez allí giramos a la derecha y seguimos la pista de la GR que va hacia Peña Plata. A ratos por la GR y a ratos paralelos a ella vamos avanzando. Paradita en la fuente de siempre a repostar un poco, y a escuchar el relato de la desaparición momentanea de Javier entre las zarzas..., y otra vez en marcha hasta Eskisaroi, donde empieza la fiesta!! Subidita de las de molinillo, traicionera y pesadita, hasta alcanzar el collado de Atxueta, menos mal que tenía a Joseba haciendome de liebre...
Otra paradita y, tras girar casi 180º, arrancamos en subida hasta el propio Atxueta, una vez arriba toca un poco de pisteo y enseguida giro a la dercha, senderito y BAJADÓN hasta Etxebertzeko borda, no conocía la bajada, muy chula, me ha gustado.
De Etxebertzeko borda, por la PR hasta Infernuko errota, fotitos y otra vez a subir. Un par de buenos repechitos y llegamos a la "carretera" que baja a Etxalar, cruzamos el barrio de Urritzokieta y a la carretera, donde nos esperaba Iñigo que había acortado por la carretera de arriba porque se le subían las bolas... ja, ja y ja! las bolas... pues en el sprint del final no se notaba, joder como aprieta!! Y eso que ganó Javier por poquito, viniendo desde muy atrás con todo metido y dando watios por doquier!! Yo creo que aguanté 100m...
El viernes es festivo y, aunque no está dado muy buen tiempo, quedamos en el punto habitual Beñardo, Iñigo, Unai y yo (el sheriff sigue por tierras endureras). Tras una leve puesta en común de ideas, lo que los guiris llaman brainstorming, arrancamos hacia la trenbidea para ir a Doneztebe. Hace un poco de fresquillo y algo de xirimiri, pero tras conseguir pasar los túneles sin chocarme con las paredes, llegamos a Doneztebe y cafelito al canto!
De Doneztebe a Elgorriaga por el caminito del cementerio y en Elgorriaga empieza la subida hasta Bostorratz, subida larga pero técnicamente sencilla, es todo cemento. Ahora toca pisteo, sin problemas excepto algun punto muy embarrado en el que vendría bien tener tracción doble... jaja.
Sin mucho lío llegamos a Bulatxiki, otro descansito para repostar y disfrutar de las vistas y bajada a Arantza por el caminito de la izquierda, con piedras y raíces mojadas, es decir, con cuidado. Son fiestas de Arantza y hay unas txistularis en la plaza, escuchamos una pieza y arrancamos de nuevo.
Ahora toca bajada complicada por lo resbaladizo que está el suelo, es el camino que parece adoquinado, pero son piedras redonditas, de estas de río y, de verdad, que hay puntos en los que hay que andar con mucho, mucho tacto y sin tocar el freno, de echo los cuatro hacemos libradas, y así hasta el angulero.
En el angulero cogemos la pista que va por la izquierda pero tenemos que parar enseguida, mi roldana ha dicho basta y se ha quedado fija, ya sabía que tenía el rodamiento jodidillo. Total, bici boca arriba y Beñardo con un palito saca toneladas de mierda de mi cambio... que vergüenza!! El resultado es satisfactorio (aunque yo creo que durará poco) y empezamos a subir hacia Itsazelaita, subidita dura, por lo menos para mi, y larga, pero que, como todas, terminan al final!
De Itsazelaita a Apittu y bajadita a Sastrin. Por cierto, nos cae un chaparrón de los buenos, breve pero intenso. En Sastrin decidimos bajar por Bordazelai y en medio de la bajada mi roldana dice que no quiere seguir dando vueltas, que cabrona la jodida!! Aflojo un poco el tornillo y a ver si aguanta hasta casa...
Terminamos la bajada en la pista de cemento y en la primera curva Iñigo pierde adherencia delante y al suelo, nada grave, unos rasponazos y su culotte preferido con un agujero en el costado. Con cuidado hasta el pueblo, cafecito en la Koxkila, manguerazo en la gasolinera y ale, cada mochuelo a su olivo!!
Beti bezala, nekatuak baino konten!!