El domingo pasado no escribí crónica así que os hago un resumen. Quedamos en el punto habitual a las 8 en punto y arrancamos hacia Lizaieta para coger la GR. Es época de caza de paloma y en Etxalar esto es sagrado, así que para no molestar, o molestar lo mínimo posible, en vez de ir por la pista habitual, vamos por un sendero que va por la falda, en vez de cresteando. Sendero mucho más bonito, pero mucho más duro que la pista…
Todo se pasa y al final llegamos a la fuente de piedra típica de esta ruta, donde paramos a comer algo ya que toca subidita maja y técnicamente no demasiado fácil. Tiramos hacia arriba hasta enganchar otra vez la GR, que seguimos casi hasta Eskisaroi, el último trozo no es GR.
En Eskisaroi se despide parte del grupo y el resto seguimos hacia Atxuela, un poco más adelante cogemos el sendero que baja a Etxebertzekoborda, de ahí a Infernuko Errota a descansar un poco y subida para salir del zulo…
En vez de bajar por la carretera intentamos otro camino por pista, tampoco merece mucho la pena, pero es mejor que la carretera. Llegamos a Etxalar y de aquí al Antoiu, a reponer líquidos!
Beti bezala, nekatuak baino konten!!
Arrancamos por la cuesta de Ardanbide para bajar a Lizuniaga y, camino de Larun, con un repecho de los majos, llegar hasta la txabola de los cazadores, antigua venta. Aquí se coge un sendero por la derecha, muy chulo, que baja hasta Sara. No es muy difícil, pero alguna caída tonta se ve por el camino, jaja!
Una vez abajo enfilamos el camino empedrado para llegar a Sara, dos o tres botellines rebeldes quieren escaparse de sus bicis, pero vuelven a su sitio. Dudamos si parar a tomar café, pero nos parece pronto así que decidimos seguir hasta Zugarramurdi. La idea es ir por el camino de los caballos pero había que haberlo cogido antes de llegar al pueblo. Total que nos toca un ratito de carretera hasta las cuevas, donde sí que enganchamos con el camino que queríamos.
Al final el camino nos deja en Zugarramurdi, pueblo de brujas, donde vamos a Graxiana a tomar el almuerzo, cortesía de Joxemi dado que en breve es su cumpleaños. Bocata de lomo y coca-cola, no toca ni pared!!
Abandonamos la pista y entre árboles llegamos a Ibañeta y a la turbera de Arxuri, espacio protegido y muy interesante, os recomiendo la visita con el modo “científico” activado en la cabeza. Muy curioso, de verdad.
Dejamos la turbera a la izquierda y seguimos el camino hacia Otsobi con intención de llegar a Lizaieta y despedirnos de Sergio y de Aitor, que se baja con Jexus por la pista ya que tiene prisa para llegar a casa con tiempo de ver las motos (de esto no digo nada que me pongo de mala leche…).
Quedamos 5 y bajamos por la subida habitual a Lizaieta, 2 pinchazos nos retrasan la llegada pero al final todos alrededor de la mesa en el Antoiu contando batallitas, esto es lo mejor de la ruta, no lo dudéis!
Beti bezala, nekatuak baino konten!!