Vuelta a la habitación, vestirnos de romanos y a por las bicis, hoy toca hacer la ruta que se hizo en las Enduro World Series en Aínsa, o hasta donde se pueda por lo menos.
Arrancamos cruzando el río hacia el pueblo y lo cruzamos otra vez para coger la carreterita que sube hacia El Soto, es un rato tranquilo, charlando y calentando un poco las piernas mientras recordamos un poco la ruta de ayer hasta que llegamos a un cruce de carretera y caminos, revisamos GPS, la chuleta en papel de Elías y decidimos coger una pista que arranca con una subida maja, además, la anécdota fue que llegamos al cruce a la vez que otro grupo de ciclistas y uno de ellos arranca a tope pasándonos a nosotros pero la santa blanca se pone a rueda y le aprieta hasta el primer descansillo, donde el chaval del otro grupo se para (porque no puede más) diciendo: “uy, voy a esperar que me he perdido…” jaja.
Tras esta subida por pista el camino se convierte en sendero, a ratos bastante técnico que, junto con la subida constante, hace que el bizcocho de chocolate del desayuno salga por las orejas. Al final todo acaba y este sendero también, llegamos a lo alto de la cresta y disfrutamos de las vistas que nos ofrece el punto. Hoy ha salido un día claro y soleado y, la verdad, hay unas vistas preciosas de la Peña Montañesa.
Continuamos por sendero en ligera subida hasta el punto más alto del día, la zona de Los Sarraus y un poco de bajada suave hasta el Cuello de San Beturián. Aquí empieza la primera BAJADA del día, bajadón corto pero intenso entre árboles y con suelo bastante aceptable para mi gusto que nos deja en una pista que sale al mismo cruce con la carretera que hemos cogido antes.
Ahora toca seguir la carretera unos metros hasta la entrada al pueblo El Soto para coger una pista que sale por la derecha y que nos llevará hasta otra buena y rápida bajadita, en la que alguno intenta frenar con el culo, esta vez descubierta y por margas hasta el lecho del río en el Barranco del Soto. Una vez abajo dudamos de por dónde seguir la ruta y entre que buscamos la continuación y miramos ruta damos una vueltecita por el río, pero finalmente enganchamos el camino bueno y volvemos a entrar en bosque para ir subiendo hasta la zona de la sierra del Banastón.
De aquí a Pumariello sendero en ligero descenso y de repente, bajadón! Bajada muy divertida que cada uno hace a su ritmo, a mi mientras me esperen abajo ya me vale… jeje! No, en serio, bajada muy divertida, con escalones, curvas, etc.
La bajada nos deja en una pista que nos lleva hasta la zona de Las Natas para empalmar con la carretera que va al pueblo. Hacemos estos kilómetros de carretera que tocan y entramos en el pueblo por donde habíamos salido a la mañana. Ahora toca subir al casco antiguo de Aínsa.
Bordeamos la parte amurallada y nos dirigimos por una carreterita local hacia el cementerio de Aínsa, lo dejamos a la izquierda y tras una suave subida por sendero toca la última bajada del día. Se nos ocurre darle la vuelta a la gopro de Elías para que grabe hacia atrás… primer intento fallido, ha grabado pero el plano coge mucho casco, para la próxima habrá que pensar otras opciones.
Tras la última bajada, quedaría subida y bajada a coda sartén, pero las piernas no están muy frescas y decidimos terminar la ruta por hoy, vuelta por un sendero hasta la carretera y entrada triunfal en el casco antiguo, que bonito es este pueblo!
Para finalizar la ruta decidimos bajar por el casco antiguo y por las escaleras, tipo a la previa de las EWS, sí, igualito… jaja.
Cruzar el puente hacia el hotel, ducha, recogida de maleta y bicis, un buen plato combinado de longaniza con una coca-cola de las grandes, cafelito, charleta y vuelta a la rutina. Hasta otra, Zona Zero!!
Beti bezala, nekatuak baino konten!!